Observación del cometa C/2022 E3 ZTF

Primera salida astronómica del año. Ya había ganas. El otoño ha sido bastante malo en lo meteorológico y unido a la temporada de planetaria con Júpiter, Saturno y Marte en su oposición daba como resultado que no tocaba el equipo de cielo profundo desde las vacaciones de verano.

Pero la llegada de una masa de aire siberiano (frío continental que habitualmente se traduce en cielos despejados y prístinos) y la presencia del cometa C/2022 E3 ZTF nos invitaba a salir en busca de cielos oscuros. La cosa no pintaba bien en un principio. Cuando llegamos al lugar de observación en Toledo teníamos el cielo lleno de nubes. La meteo nos había fallado y aunque en un principio pronosticaba que se despejaría al anochecer la verdad es que tuvimos que esperar hasta las 21:00 para poder empezar a hacer algo. Eso sí, cuando se fueron las nubes se quedó un cielo espectacular ¡Pero con un frío seco que te entraba por los pies y se te metía en los huesos!

Con el equipo de astrofoto me lo tomé con calma. Ajusté bien los cables, hice una puesta en estación a la polar doble (la primera vez debí tocar la montura porque se desajustó) y una calibración con PHD2 que me dió un guiado muy bueno durante toda la jornada. El objetivo fue la Nebulosa del Árbol de Navidad o NGC2264 que no he fotografiado nunca. Debido a que empezamos algo más tarde no saqué toda la señal que hubiera querido pero me dio tiempo de hacer una ronda LRGB.

Mientras la Star Adventurer y la Canon sacaban fotos por un lado y el Esprit 100 sacaba fotos por el otro tiré de prismáticos 10×50 para hacer un poco de visual. El Cúmulo del Pesebre (M44), los cúmulos de Auriga, la Galaxia de Andrómeda, el doble de Perseo, la Nebulosa de Orión son objetos que no me cansaré nunca de observar. Me transporto a lugares remotos y me quedo absorto en viajes imaginarios a través de nubes gaseosas y conglomerados de estrellas.

Luego a eso de las 00:00 empezamos a buscar el cometa C/2022 E3 ZTF que está siendo el protagonista de los cielos durante este inicio de año. Ya lo conseguimos fotografiar desde casa con la contaminación lumínica de Madrid pero queríamos hacerlo bien desde el campo. No obstante nuestra ubicación no era la idónea ya que el cometa sale por el NE y al estar en Toledo nos pillaba toda la contaminación lumínica de Madrid en medio a pesar de estar a más de 100km de distancia. Aún así pudimos localizarlo fácilmente con los prismáticos 10×50 y luego con un telescopio refractor 100/600. Con prismáticos tenía un aspecto de cúmulo globular junto a un triple dueto de estrellas con distribución idéntica (HIP 75587-HIP 75425, HIP 76509-HIP 76376 y HIP 77370-HIP 77272) que causaban una sensación rarísima, como si alguien hubiera hecho un copy-paste varias veces en el cielo.

A través del telescopio si que se apreciaba algo de cola con visión indirecta aunque ni rastro de color verdoso. Durante los últimos días el cometa ha empezado a presentar anti-cola a causa de que lo vemos casi de frente. También se había producido una desconexión de la cola iónica a causa del viento solar (todo esto solo apreciable en fotografía). En cualquier caso fue muy interesante poder observar el primer cometa desde que nos visitó Neowise hace un par de años. Durante los próximos días el ZTF irá siendo visible cada noche más temprano.

Aproveché también para hacerle algunas fotos con la Canon y con el telescopio y a eso de las 02:00 dimos por finalizada la sesión. Lo suyo hubiera sido quedarnos algo más para ver el cometa más alto en el cielo pero tras 8 horas en el campo y con las baterías del ordenador ya casi consumidas no quedó otra que retirarnos. He encargado otra batería de 50.000mA porque he notado que una de las 2 que tengo ya dura bastante poco.

En resumen, una noche muy disfrutada, que empezó con nubes y terminó con un cielo estupendo marcando el termómetro de infrarrojos -34ºC y el SQM 21.07. Esperemos que el tiempo siga siendo benevolente y nos deje disfrutar alguna noche más del cometa.